La vida y el trabajo continúan en Gandiol, en esta nueva realidad en la que es fácil dejarse llevar por la calma, la tranquilidad y la brisa del mar. Mucha paz y al mismo tiempo mucho ajetreo. La puerta de casa no deja de abrirse y cerrarse dando paso a nuevas sonrisas, abrazos y saludos cada día. Mucha vitalidad pero también mucha libertad para el desfile de moscas que ha decidido instalarse en casa y degustar los mangos que tanto nos refrescan. ¡Y eso que nos han dicho que no ha hecho más que empezar! Ya estamos probando técnicas para cazarlas… ¡pero cualquier idea es más que bienvenida!.

A finales de la semana pasada Mamadou viajó a Rosso en busca de nuestra anhelada arcilla. El Ramadán y el sol abrasando la cantera de arcilla explicaba que no hubiera gente trabajando allí. El tiempo apremia ya que la temporada de lluvias se acerca, así que hemos decidido pedir los adobes ya hechos para poder tenerlos cuanto antes. Ya hemos encargado más de 2000 bloques, suficientes para levantar las paredes de la biblioteca y de la administración, y el jueves recibimos el primer camión que tuvo que sortear la arena con la ayuda de todos para poder llegar al terreno. También hemos recibido ya unos 500 bloques de BTC (tierra comprimida). Ha sido un regalo de Doudou, el ingeniero senegalés que nos ha ayudado desde el comienzo… ¡¡Djerejef Doudou!!

El Domingo tuvimos la segunda reunión con la comunidad, la primera desde que llegamos. Preparamos la maqueta con mucho ritmo y con mucha motivación y estábamos expectantes por ver qué pensarían. El objetivo era conocernos y presentar el proyecto, pero también queríamos escuchar sus comentarios y propuestas sobre el diseño y las técnicas de construcción: teníamos en mente poder definir con ellos detalles constructivos como el suelo, las puertas y ventanas, el paisajismo, el mobiliario… Cuando intervinieron, uno a uno, nos dimos cuenta que lo que más ganas tenían era de contribuir y de planear acerca de cómo y para qué se utilizará el centro, y eso es algo que nos hizo ver el inmenso potencial del mismo. Al fin y al cabo, la infraestructura es sencilla de levantar, pero lo que realmente importa es que el espacio se use y se gestione de manera que se convierta en una verdadera herramienta de desarrollo. ¡Así que vamos por muy buen camino!

El resto de materiales también han ido llegando durante la semana: la grava, la arena, el cemento, la ferralla… pero hemos tenido problemas para obtener uno de los elementos más necesarios… ¡el agua! Comenzamos a cavar un pozo en el terreno con la esperanza de llegar a agua dulce, pero no dio sus frutos… Decidimos por tanto hormigonar el pozo y utilizarlo como depósito de agua para poder fabricar el hormigón de los cimientos… Cada vez vemos más clara la necesidad del sistema de recogida de agua de lluvias que ayudará a poder mantener los huertos de manera sostenible. Estamos haciendo cálculos para comprender la capacidad de recogida y optimizar el sistema al máximo ya que, aunque cae una gran cantidad de agua en los días de lluvia, éstos son escasos a lo largo del año…

Aprovechamos también para presentaros a Ndaga, al que iréis conociendo más a lo largo del proyecto. Un trabajador muy motivado que no deja de sonreír ni por un minuto a pesar del hambre, la sed y el calor en este mes de Ramadán… ¡Todo un ejemplo de fortaleza y superación! Ya está cavando las zanjas y todo avanza a un ritmo sorprendente… Cuánta razón tenía nuestra Xarit!

Life goes on in Gandiol. In this new life it is easy to let yourself go: the calm the sea breeze… Very peaceful, but also busy. The door keeps opening and closing and welcoming new smiles, hugs and greetings every day. Full of vitality, but also with free pass for the flies’ parade that has decided to settle in our house and taste our refreshing mangos. And they have told us that this has just started! We are already testing different techniques to catch them out… but any idea is more than welcome!

At the end of the week Mamadou traveled to Rosso looking for our long-awaited clay. Ramadan and the sun scorching the clay quarry explained that there were no people working there. Time is short until the rainy season arrives, so we decided to ask for the bricks in order to have them as soon as possible. We have already commissioned more than 2000 blocks, enough to raise the walls of the library and the administration, and on Thursday we received the first truck that had to overcome the sand with everyone´s help to get to the ground. We have also received about 1500 blocks of CEB (compressed earth block). A gift from Doudou, a Senegalese engineer who has helped us from the beginning… Djerejef Doudou!

Sunday the second meeting with the community took place, the first since we arrived. We prepared the model with rhythm and with lots of motivation, eager to see what they will think. The objective was to integrate people and show the project, besides, we also wanted to hear their comments and proposals regarding the design and construction techniques. We had in mind to define construction details such as the floor, doors and windows, landscape, furniture… with the community. When they intervened, one by one, we realized that what they wanted was to contribute and think about how the Center will be used and that is something that made us see a great potential on it. After all, the infrastructure is easy to raise, but what really matters is that the space is used and managed so that it becomes a real tool for development. So we are on the good track!

Other materials have also arrived during this week, like, gravel, sand, cement, metal skeleton, but we have had problems with one of the most necessary elements: the water! We started to dig a hole in the ground hoping to reach fresh water, but things did not happened like we wanted. Therefore, we decided to concrete the hole and use it as a water reservoir to manufacture concrete for the foundation. Besides, we can see clearly the need for a water collection system that will help to maintain the orchards in a sustainable manner. We are doing maths to understand the collection capacity and optimize the system to the fullest since even when it rains, it happens with strength, the rainy days are rare throughout the year…

We would also like to introduce you to Ndaga, whom you will get to know more during the development of this project. A highly motivated worker who doesn’t stop smiling even for a second despite the hunger, thirst and heat during this month of Ramadan, an example of strength and overcoming! He is already digging ditches and everything moves at an astonishing pace… Exactly how our Xarit was!